Terremotos en México: estado fallido, sociedad que no
>Dennis J Bernstein
La tierra bajo México continúa temblando, y los mexicanos continúan durmiendo con un ojo abierto, listos para tomar las calles cuando el próximo terremoto ataque. De hecho, un fuerte temblor en el sur de México suspendió temporalmente la búsqueda de sobrevivientes del terremoto de la semana pasada en la Ciudad de México.
El sábado, los mexicanos se precipitaron a las calles mientras sonaban las alarmas en todo Oaxaca, a unos 300 kilómetros al sur de la ciudad de México. Los temblores del terremoto de 6,1 días del sábado se hicieron sentir en varias partes de la ciudad de México, donde la gente también salió a la calle mientras sonaban alarmas de terremoto.
El terremoto de la semana pasada en la ciudad de México causó más de 300 muertos y contó, mientras los equipos de rescate continúan excavando entre los escombros para posibles supervivientes. En el momento de redactar este informe, hay noticias de personas aún atrapadas en diferentes lugares alrededor de la extensa ciudad. Y, según muchos informes, la respuesta del gobierno mexicano ha sido inadecuada.
Hablé el lunes con Molly Kate Gosa, corresponsal especial de Pacifica's Flashpoints, para actualizar informes sbre la situación en el terreno. Goss dijo que la recuperación va lentamente, y que la sociedad civil sigue desempeñando un papel importante en la prestación de asistencia a los más afectados por el terremoto.
Dennis Bernstein: ¿Por qué no nos da una idea de lo que pasó durante el fin de semana y lo que estos últimos terremotos y temblores están haciendo a los nervios de la gente?
Molly Goss: Alrededor de las 7:50 del sábado por la mañana me desperté al alerta del terremoto y no podía creer que lo estaba de nuevo escuchando. Este es el tercer gran terremoto en dos semanas. Definitivamente creo que el nivel de ansiedad de la gente ha subido mucho.
Soy del norte de California, donde tenemos un montón de terremotos y nunca he tenido mucho miedo de ellos, hasta ahora. Muchas personas te dirán que es difícil para ellos lograr dormir, es difícil cada vez que oyen pasar una ambulancia. Este sismo fue un poco más de seis en la escala de Richter.
La gente está tratando de volver a sus vidas, en cierta medida. Un montón de restaurantes y tiendas están abiertas, aunque la mayoría de las escuelas en la Ciudad de México todavía están cerradas. Cuando vas a los sitios donde están buscando a la gente, todavía hay cientos de personas esperando para ayudar en cualquier forma que puedan.
DB: La gente ni siquiera sabe realmente en este punto cuán peligroso es cada edificio.
MG: Hay tantas cosas que no sabemos. No sabemos qué edificios son inseguros para habitar. Hay mucha incertidumbre sobre muchos de estos edificios. En la década de 1990 hubo aquí un enorme empujón hacia la construcción de edificios muy altos. Ahora la pregunta es si esos edificios tienen los permisos correctos y quién los emitió. En las semanas y meses y años venideros, va a haber un montón de preguntas sobre la urbanización que ha estado ocurriendo en la Ciudad de México durante las últimas décadas.
DB: ¿Dijiste que la gente sigue buscando sobrevivientes bajo los escombros?
MG: En un sitio a unos 20 minutos de aquí, todavía están buscando más de 40 personas en el cuarto piso de un edificio de seis pisos. En los últimos días no han encontrado a nadie, pero todavía están allí.
Miembros de las familias organizaron hoy una protesta quejándose de que el gobierno, con la marina y el ejército, no les está dando la información correcta. En situaciones como ésta en México, muchas personas no creen en el gobierno. Hay muchos informes de que el gobierno no deja entrar a civiles, que se están presentando en estos sitios por miles.
En este momento, el problema principal para muchos mexicanos es que no quieren que el equipo pesado sea traído todavía. En 1985 las personas fueron encontradas al menos una semana después del terremoto. La gente no quiere que los tractores y otros equipos pesados entren aún, porque eso podría conducir a la muerte de sus seres queridos.
DB: Con estos dos últimos terremotos durante el fin de semana, puedo imaginar que la gente está mirando hacia atrás de los daños y escuchando la radio para hacer un descanso por si la tierra comienza a temblar de nuevo. No puedo imaginar que la gente sea capaz de relajarse.
MG: La primera vez que escuché la alarma del terremoto fue una prueba y me salí del edificio, pero este sábado me desperté en un segundo, agarré a mi perro y salí volando del edificio. Lo que estoy escuchando de mucha gente es que esto es algo a largo plazo, hay efectos que continuarán durante mucho tiempo en el futuro. Creo que la gente va a estar en vilo durante algún tiempo.
Pero a pesar de que la gente está nerviosa y tiene problemas para dormir y hablar con sus hijos sobre la imposibilidad de predecir cuándo esto podría suceder de nuevo, la solidaridad continúa. La gente sigue ahí con sus cascos, llevando agua y medicinas a los rescatistas.
DB: ¿Está el gobierno aumentando su acción ahora? ¿Las personas obtienen el apoyo que necesitan? ¿O es esto un problema persistente?
MG: Yo diría que es un problema continuo. En el estado de Morelos, que fue duramente golpeado por el terremoto del 19 de septiembre, ha sido cuestionable si la ayuda que se ha enviado realmente llega a la gente. Las personas de ciertas comunidades de Oaxaca se han quejado de no recibir ninguna ayuda del gobierno después del primer terremoto. La gente se ha estado juntando y tratando de obtener ayuda de fuentes privadas.
Justo en la calle de donde vivo, por ejemplo, un bar se ha convertido en un centro para enviar ayuda a los diferentes estados que se han visto afectados. La sociedad civil está realmente aumentando su accionar, pero no puedo decir lo mismo de la respuesta del gobierno.
[Dennis J Bernstein es un anfitrión de "Flashpoints" en la red de radio Pacifica y el autor de Ed especial: Voces de un aula oculta]
ConsortiumNews https://consortiumnews.com/2017/09/26/new-earthquake-leaves-mexico-on-edge/
>Dennis J Bernstein
La tierra bajo México continúa temblando, y los mexicanos continúan durmiendo con un ojo abierto, listos para tomar las calles cuando el próximo terremoto ataque. De hecho, un fuerte temblor en el sur de México suspendió temporalmente la búsqueda de sobrevivientes del terremoto de la semana pasada en la Ciudad de México.
El sábado, los mexicanos se precipitaron a las calles mientras sonaban las alarmas en todo Oaxaca, a unos 300 kilómetros al sur de la ciudad de México. Los temblores del terremoto de 6,1 días del sábado se hicieron sentir en varias partes de la ciudad de México, donde la gente también salió a la calle mientras sonaban alarmas de terremoto.
El terremoto de la semana pasada en la ciudad de México causó más de 300 muertos y contó, mientras los equipos de rescate continúan excavando entre los escombros para posibles supervivientes. En el momento de redactar este informe, hay noticias de personas aún atrapadas en diferentes lugares alrededor de la extensa ciudad. Y, según muchos informes, la respuesta del gobierno mexicano ha sido inadecuada.
Hablé el lunes con Molly Kate Gosa, corresponsal especial de Pacifica's Flashpoints, para actualizar informes sbre la situación en el terreno. Goss dijo que la recuperación va lentamente, y que la sociedad civil sigue desempeñando un papel importante en la prestación de asistencia a los más afectados por el terremoto.
Dennis Bernstein: ¿Por qué no nos da una idea de lo que pasó durante el fin de semana y lo que estos últimos terremotos y temblores están haciendo a los nervios de la gente?
Molly Goss: Alrededor de las 7:50 del sábado por la mañana me desperté al alerta del terremoto y no podía creer que lo estaba de nuevo escuchando. Este es el tercer gran terremoto en dos semanas. Definitivamente creo que el nivel de ansiedad de la gente ha subido mucho.
Soy del norte de California, donde tenemos un montón de terremotos y nunca he tenido mucho miedo de ellos, hasta ahora. Muchas personas te dirán que es difícil para ellos lograr dormir, es difícil cada vez que oyen pasar una ambulancia. Este sismo fue un poco más de seis en la escala de Richter.
La gente está tratando de volver a sus vidas, en cierta medida. Un montón de restaurantes y tiendas están abiertas, aunque la mayoría de las escuelas en la Ciudad de México todavía están cerradas. Cuando vas a los sitios donde están buscando a la gente, todavía hay cientos de personas esperando para ayudar en cualquier forma que puedan.
DB: La gente ni siquiera sabe realmente en este punto cuán peligroso es cada edificio.
MG: Hay tantas cosas que no sabemos. No sabemos qué edificios son inseguros para habitar. Hay mucha incertidumbre sobre muchos de estos edificios. En la década de 1990 hubo aquí un enorme empujón hacia la construcción de edificios muy altos. Ahora la pregunta es si esos edificios tienen los permisos correctos y quién los emitió. En las semanas y meses y años venideros, va a haber un montón de preguntas sobre la urbanización que ha estado ocurriendo en la Ciudad de México durante las últimas décadas.
DB: ¿Dijiste que la gente sigue buscando sobrevivientes bajo los escombros?
MG: En un sitio a unos 20 minutos de aquí, todavía están buscando más de 40 personas en el cuarto piso de un edificio de seis pisos. En los últimos días no han encontrado a nadie, pero todavía están allí.
Miembros de las familias organizaron hoy una protesta quejándose de que el gobierno, con la marina y el ejército, no les está dando la información correcta. En situaciones como ésta en México, muchas personas no creen en el gobierno. Hay muchos informes de que el gobierno no deja entrar a civiles, que se están presentando en estos sitios por miles.
En este momento, el problema principal para muchos mexicanos es que no quieren que el equipo pesado sea traído todavía. En 1985 las personas fueron encontradas al menos una semana después del terremoto. La gente no quiere que los tractores y otros equipos pesados entren aún, porque eso podría conducir a la muerte de sus seres queridos.
DB: Con estos dos últimos terremotos durante el fin de semana, puedo imaginar que la gente está mirando hacia atrás de los daños y escuchando la radio para hacer un descanso por si la tierra comienza a temblar de nuevo. No puedo imaginar que la gente sea capaz de relajarse.
MG: La primera vez que escuché la alarma del terremoto fue una prueba y me salí del edificio, pero este sábado me desperté en un segundo, agarré a mi perro y salí volando del edificio. Lo que estoy escuchando de mucha gente es que esto es algo a largo plazo, hay efectos que continuarán durante mucho tiempo en el futuro. Creo que la gente va a estar en vilo durante algún tiempo.
Pero a pesar de que la gente está nerviosa y tiene problemas para dormir y hablar con sus hijos sobre la imposibilidad de predecir cuándo esto podría suceder de nuevo, la solidaridad continúa. La gente sigue ahí con sus cascos, llevando agua y medicinas a los rescatistas.
DB: ¿Está el gobierno aumentando su acción ahora? ¿Las personas obtienen el apoyo que necesitan? ¿O es esto un problema persistente?
MG: Yo diría que es un problema continuo. En el estado de Morelos, que fue duramente golpeado por el terremoto del 19 de septiembre, ha sido cuestionable si la ayuda que se ha enviado realmente llega a la gente. Las personas de ciertas comunidades de Oaxaca se han quejado de no recibir ninguna ayuda del gobierno después del primer terremoto. La gente se ha estado juntando y tratando de obtener ayuda de fuentes privadas.
Justo en la calle de donde vivo, por ejemplo, un bar se ha convertido en un centro para enviar ayuda a los diferentes estados que se han visto afectados. La sociedad civil está realmente aumentando su accionar, pero no puedo decir lo mismo de la respuesta del gobierno.
[Dennis J Bernstein es un anfitrión de "Flashpoints" en la red de radio Pacifica y el autor de Ed especial: Voces de un aula oculta]
ConsortiumNews https://consortiumnews.com/2017/09/26/new-earthquake-leaves-mexico-on-edge/
