Ruso opositor de izquierda preso

Mijail Lobanov 

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En la víspera de Año Nuevo, terminé en un centro de detención especial después de una actuación de las fuerzas de seguridad que irrumpieron en mi apartamento el 29 de diciembre. Los "directores" están nuevamente tratando de intimidar a la sociedad. El efecto es el contrario. Estamos convencidos de que el mundo está plagado de injusticia y violencia sin sentido. Lo que significa que hay que cambiarlo.

Con la represión, el régimen sigue cavando un hueco para sí mismo. Sin embargo, estas represiones también son peligrosas para la sociedad. No solo porque arruinan la vida de las personas. Pero también porque dan lugar a una sed de venganza, que puede interferir con nosotros en el momento de una ruptura radical con el pasado.

Es importante recordar: el problema no está en la cúpula ni en quienes le brindan medios, poder y apoyo gerencial. El problema está en todo el sistema de reproducción de la desigualdad económica, que da lugar a una desigualdad política colosal. Y eso significa guerras y dictaduras.

Para mí, el arresto es una nueva experiencia, nuevas interacciones con personas de otros entornos. Y esta experiencia enriquece, posibilita comparar tus ideas, actitudes e intuiciones con la práctica de otras personas.

Saldré el 13 de enero y seguiré actuando y hablando. Y si fabrican otra cosa, volverá a producirse el efecto contrario.

Ninguna de las iniciativas en las que he estado metido morirá: hay mucha gente convencida. Voy a desviarme de dos trabajos y la necesidad de llegar a fin de mes y concentraré todos mis recursos mentales en la lucha por un futuro para todos.*

Fuente : Rabkor.ru

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