¡Liberen a Boris Kagarlitsky y a todos los demás presos políticos rusos contra la guerra!
Nosotros, los abajo firmantes, nos sentimos profundamente conmocionados al enterarnos de que el 13 de febrero el líder intelectual socialista y activista antibélico ruso Boris Kagarlitsky fue condenado a cinco años de prisión.
Kagarlitsky fue arrestado por el absurdo cargo de 'justificar el terrorismo' en julio del año pasado. Después de una campaña mundial que reflejaba su reputación mundial como escritor y crítico del capitalismo y el imperialismo, su juicio terminó el 12 de diciembre con un veredicto de culpabilidad y una multa de 609 mil rublos.
La fiscalía apeló entonces contra la multa por 'injusta debido a su excesiva indulgencia' y afirmó falsamente que Kagarlitsky no podía pagar la multa y no había cooperado con el tribunal. De hecho, había pagado la multa en su totalidad y había proporcionado al tribunal todo lo que pedía.
El 13 de febrero, un tribunal militar de apelación lo envió a prisión durante cinco años y le prohibió administrar un sitio web durante dos años después de su liberación.
La revocación de la decisión judicial original es un insulto deliberado a los miles de activistas, académicos y artistas de todo el mundo que respetan a Kagarlitsky y participaron en la campaña mundial para su liberación. La sección de la ley rusa utilizada contra Kagarlitsky prohíbe efectivamente la libertad de expresión. La decisión de sustituir la multa por prisión se tomó bajo un pretexto completamente falso. Sin duda, la acción de la corte representa un intento de silenciar las críticas en la Federación Rusa a la guerra del gobierno en Ucrania, que está convirtiendo al país en una prisión.
El juicio falso contra Kagarlitsky es el último de una ola de represión brutal contra los movimientos de izquierda en Rusia. Las organizaciones que han criticado sistemáticamente al imperialismo, occidentales y otros, están ahora bajo ataque directo, muchas de ellas prohibidas. Decenas de activistas ya están sirviendo a largo plazo simplemente porque no están de acuerdo con las políticas del gobierno ruso y tienen el valor de hablar. Muchos de ellos son torturados y sometidos a condiciones que ponen en peligro la vida en las colonias penales rusas, privadas de atención médica básica. Los políticos de izquierda se ven obligados a huir de Rusia, enfrentando cargos criminales. Los sindicatos internacionales como la IndustriALL y la Federación Internacional de Transporte están prohibidos y cualquier contacto con ellos dará lugar a largas penas de prisión.
Hay una razón clara para esta represión contra la izquierda rusa. El fuerte costo de la guerra da lugar a un creciente descontento entre la masa de los trabajadores. Los pobres pagan por esta masacre con sus vidas y su bienestar, y la oposición a la guerra es consistentemente más alta entre los más pobres. La izquierda tiene el mensaje y la resolución de exponer la conexión entre la guerra imperialista y el sufrimiento humano.
Kagarlitsky ha respondido a la indignante decisión del tribunal con calma y dignidad: 'Solo necesitamos vivir un poco más y sobrevivir a este período oscuro para nuestro país', dijo. Rusia se acerca a un período de cambio radical y agitación, y la libertad para Kagarlitsky y otros activistas es una condición para que estos cambios tomen un rumbo progresivo.
Exigimos que Boris Kagarlitsky y todos los demás prisioneros contra la guerra sean liberados de inmediato e incondicionalmente.
También pedimos a las autoridades de la Federación de Rusia que reviertan su creciente represión de la disidencia y respeten la libertad de expresión y el derecho de protesta de sus ciudadanos.
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Los signatarios iniciales incluyen:
Naomi Klein, escritora (Canadá)Kohei Saito, Universidad de Tokio (Japón)
Slavoj Žižek, Universidades Birkbeck y Ljubljana (Eslovenia)
Tariq Ali, escritor (Gran Bretaña)
Yanis Varoufakis, escritor y líder político (Grecia)
Kavita Krishnan, activista por los derechos de las mujeres (India)
Judy Rebick, escritora y activista feminista (Canadá)
Walden Bello, Enfoque en el Sur Global (Filipinas)
Claudio Katz, Universidad de Buenos Aires (Argentina)
Luis Bonilla-Molina, Otras Voces en Educación (Venezuela)
Reinaldo Iturriza López, sociólogo (Venezuela)
Patrick Bond, Universidad de Johannesburgo (Sudáfrica)
Jeremy Corbyn, miembro del Parlamento (Gran Bretaña)
John McDonnell, miembro del Parlamento (Gran Bretaña)
Jean-Luc Mélenchon, líder político (Francia)
Bernd Riexinger, miembro del Bundestag (Alemania)
Andrej Hunko, miembro del Bundestag (Alemania)
Fernanda Melchionna, Diputada Federal (Brasil)
Sâmia Bomfim, diputada federal (Brasil)
Luciana Genro, Diputada de Estado, Rio Grande do Sul (Brasil)
Myriam Bregman, Diputada Nacional (Argentina)
Nicolás del Caño, Diputado Nacional (Argentina)
Christian Castillo, Diputado Nacional (Argentina)
Alejandro Vilca, Diputado Nacional (Argentina)
Richard Boyd-Barrett, miembro del Parlamento (Irlanda)
Sue Bolton, concejal de la ciudad de Merri-bek (Australia)
Sarah Hathway, concejal de la ciudad de Geelong (Australia)
Choo Chon Kai, Parti Sosialis Malasia (Malasia)
Dipankar Bhattacharya, Secretario General, Partido Comunista de Liberación (Marxista-Leninista) de la India (India)
Sonny Melencio, Presidente, Partido Lakas ng Masa (Filipinas)
Ammar Ali Jan, Secretario General, Partido Haqooq-e-Khalq (Pakistán)
Federico Fuentes, editor, LINKS Revista Internacional de Renovación Socialista (Australia)
Pip Hinman, editor, Izquierda Verde (Australia)
Susan Price, editora, Izquierda Verde (Australia)
Jacob Andrewarthe, coordinador nacional de la Alianza Socialista (Australia)
Sam Wainwright, coordinador nacional de la Alianza Socialista (Australia)
Sue Bull, coordinadora nacional de la Alianza Socialista (Australia)
Petition: Free Boris Kagarlitsky and all other Russian anti-war political prisoners! | Links
