Partido Democrático de los Pueblos (Turquía): Kobani no fue una excepción
Ertuğrul Kürkçü
Ankara cree que la invasión de Ucrania por parte de Rusia ha abierto una ventana de oportunidad en su guerra de un siglo con los kurdos del norte al expandir su influencia más allá de las fronteras de la República Turca.
El régimen de Erdogan espera profundizar su explotación del llamado del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de 2015 para una "alianza internacional" directamente contra ISIS y al-Nusra. Movilizó ese llamado para atacar a los gobiernos autónomos kurdos en Siria e Irak que los kurdos habían ganado a través de su lucha contra ISIS.
Desde 2016, Turquía ha ocupado Êfrin, Gîre Sıpî, Serekanî y Jarablus. Tiene al menos 5.000 soldados en Siria para establecer un "cinturón de seguridad" de 30 kilómetros de profundidad, de acuerdo con Rusia y EE.UU. En Idlib [zona "desmilitarizada" en Siria acordada en 2018 entre Rusia y Turquía] mantiene tropas en 12 puestos de observación como parte de la llamada "desmilitarización" de las fuerzas yihadistas. En Irak, tiene al menos 2.500 efectivos, principalmente para brindar entrenamiento militar a los peshmerga del Gobierno Regional del Kurdistán iraquí (GRK) [gobierno regional autónomo de derecha en el Kurdistán iraquí].
La guerra de Erdogan contra los kurdos no es nueva, pero en la práctica difiere de la prosecución de la guerra por parte de los gobiernos turcos anteriores en dos aspectos, lo que le da una característica distintiva.
Primero, Erdogan se basa en la acción militar en el extranjero en Kurdistán del Sur y Occidental para producir el consentimiento para su gobierno en casa. Si Turquía alguna vez tuvo un objetivo real de resolver la "cuestión kurda", se ha perdido por completo en este proceso. Así, Ankara, con su estrategia de “derrotar” a los kurdos y “acabar” con el problema, ha extendido la guerra más allá de las fronteras de Turquía, a todos los lugares donde viven los kurdos, internacionalizando el conflicto como nunca antes en la historia. La consecuencia inevitable de esta "guerra prolongada" ha sido la construcción de una "autocracia sunita-turca" —una forma de fascismo— que es innovación en la práctica estatal.
En segundo lugar, en los últimos 10 años del gobierno de Erdogan, Turquía ha desarrollado un “complejo militar-industrial” —un grupo de capitalistas que se beneficia particularmente de la guerra con la ayuda del estado— cuyos estrechos intereses se han colocado por encima de los del capital como un entero.
Yaşar Yakış, Ministro de Relaciones Exteriores del primer gobierno del AKP en 2002, cree que las operaciones transfronterizas en curso en el norte de Irak, que tienden a expandirse hacia el norte de Siria, también pueden estar relacionadas con obtener una ventaja para las próximas elecciones generales como parte de la estrategia de poder del régimen de Erdogan. Como ha argumentado, “cuando un gobierno tiene esa oportunidad, no quiere perderla. Como dice el refrán, las estrellas en el cielo se alinean una vez cada 287 años. Si las estrellas se juntan así para Turquía una vez cada 287 años, es posible que quieran aprovecharla. Todos los países quieren aprovechar esa oportunidad".
En 2014, Erdogan percibió una oportunidad cuando ISIS salió de Irak para invadir las áreas del lado sirio de la frontera donde viven kurdos y árabes. Mientras los corazones de 20 millones de kurdos que viven en Turquía estaban con la resistencia al asedio de Kobani por parte de ISIS en el lado sirio de la frontera, Erdogan celebró prematuramente la victoria de los islamistas. En la ciudad fronteriza turca de Islahiye, dijo: "Allí, Kobani ha caído y sigue cayendo". Esperaba romper la determinación de la resistencia de Rojava y pidió a las Naciones Unidas que detuvieran los ataques aéreos contra ISIS.
Pero la actitud hostil de Erdogan alimentó un estado de ánimo de rebelión sin precedentes entre los kurdos del norte. Las fuerzas seculares y democráticas de Turquía entraron en acción y se galvanizó la solidaridad internacional. En total, el flujo de luchadores por la libertad de todo el mundo a Rojava solo se aceleró. La resistencia creció en fuerza y derrotó a ISIS. Rojava estableció un ejemplo histórico de lucha basada en el autogobierno libre y autónomo.
Este proceso sacudió el statu quo político de Turquía. La solidaridad internacional de las fuerzas democráticas de Turquía y los demócratas y defensores de los derechos humanos de Occidente con la revolución de Rojava desempeñó un papel fundamental en la ruptura de la alianza entre el AKP de Erdogan con ISIS y el Islam político en general.
Este momento forjó al Partido Democrático de los Pueblos (HDP) como una fuerza política cohesionada. Las fuerzas políticas democráticas, socialistas, feministas y alevíes de Turquía formaron una asociación social y espiritual con los kurdos frente al futuro apocalíptico que representa ISIS. El HDP se convirtió en un tercer polo en la política turca, rompiendo el binario entre el autoritarismo nacionalista turco y la política islamista. En las elecciones generales de junio de 2015, el avance del HDP forzó un parlamento sin mayoría absoluta, lo que le quitó la mayoría a Erdogan.
Durante los últimos siete años, en este contexto, Erdoğan ha estado luchando contra el pueblo kurdo y la democracia turca con el objetivo de institucionalizar el fascismo en casa y el colonialismo en el extranjero para resucitar el statu quo turco-islámico colapsado. La dinámica ha convertido una guerra interna en una guerra regional.
Hoy, aquellos que participan en la misión de solidaridad internacional a Erbil para llamar la atención del mundo sobre estas ambiciones colonialistas y expansionistas, pueden seguir con confianza los pasos del gran avance de 2014. La solidaridad que destruyó a ISIS despertó las esperanzas kurdas en las cuatro partes de Kurdistán y frustró los crueles cálculos de Erdogan, no fue un accidente. Fue una consecuencia necesaria del flujo progresivo de la historia.
Lo logramos ese día. La solidaridad triunfó. Lo podemos hacer de nuevo.*
Ertuğrul Kürkçü es el presidente honorario del Partido Democrático de los Pueblos de Turquía.
